Y alguien abrió el cajón de las obviedades. Meditamos el hecho de haber tirado mucho y muy bueno en el fondo de una pitillera, pero la verdad es que las conclusiones olían a humo. Olían fatal. Más obviedades.
En otro tiempo, dijeron, los monos probaban primero lo que fumamos. Eso ahora amplifica los costes hasta un techo intolerable y se ha convertido en pasado, en pieza de museo. En fin, dijo Charlie, tengo un cáncer de garganta al que hay que hablarle de usted; mirad, sé de lo que hablo.
Uhmmm de...¿Humberto?
ResponderEliminarme gusta lo que escribes
ResponderEliminaruna follower mas ^^
Creo que mis compañeros y yo vamos a tomar el singular de una forma colectiva.
ResponderEliminarNo creo que sea Humberto.
ResponderEliminarCuando ya se está inmerso en la adicción, la pregunta es: ¿qué mata más rápido? ¿La angustia de la falta o el vicio mismo?
Muy bueno.
Estoy dejando de fumarrrrrrrrrr!!!!
ResponderEliminarNo me recuerden el tabaco, jejeje...
Besos desde el aire
Dicen por ahí que lo que realmente mata es el que te estén recordando continuamente que mata. Vamos, que se crea esa realidad. No sé, como a mi no me gusta fumar...relato condensado y agridulce, como un pitillo.
ResponderEliminarTema peliagudo, libertad para el que fuma, libertad para él que esta alrededor .... soy hija de fumador, esposa de fumador y estoy harta porque ninguno de los dos ha sido incapaz de dejarlo cuando nietas e hijas son aún bebés. Sin comentarios.
ResponderEliminarPor cierto, este relato es de Alabama ... creo!
Un saludazo para los tres. Amelia.
<<Libertad de decisión, y busqueda conciente del final... Habla una ex fumadora...
ResponderEliminarBeso (es Humberto, estoy segura)
Complicadito el tema del tabaco...si bien, fumar mata, una obviedad...
ResponderEliminarBuen micro...otra obviedad...
De quién...obvio...
Y a este paso guardarán el tabaco en el cajón y empezarán a fumarse las obviedades. Para mí, Mr. Alabama.
ResponderEliminarHola Campeones.
ResponderEliminarSiento decir que si el pitillo fuera Judas, seria un santo pitillo.
Los pitillos solamente vienen de mano del diablo.
Lucha contra el tabaco, a muerte.
Un abrazo
Ricard y su asma.
Llevo tres días intentando controlar una crisis asmática y me meto en un post lleno de humo. Si hubiera estado en el hospital y me hubieran puesto la "pipa" con el oxígeno y el broncodilatador al menos podría decir que estaba "fumada" y que por eso me he perdido en vuestro texto, pero no ha sido así (al menos no en lo de la pipa).
ResponderEliminarLo que sí os voy a decir es otra cosa: los dos últimos párrafos, sobre todo el último, me han hecho recordar al magnífico Castelao y sus historias de difuntiños que parecen más vivos que los vivos en realidad. Quizá no lo conozcais; la literatura gallega no es conocida por todo el mundo aunque sí haya llegado a todo él a través de las gentes que de aquí salieron a "vivir" y que se encuentran en los rincones más insospechados. Os recomiendo la lectura de "Un ollo de vidro" (recordareis este post...) y de "Os vellos non deben enamorarse". De verdad que merece la pena leerlo.
¡Biquiños!
Carmen.
Y hay quienes siguen insistiendo...
ResponderEliminarsaludos.
Yo ya llevo 30 años sin fumar gracias a Dios y no tengo deseos tampoco.
ResponderEliminar……………………………….@@@@ Que Tengas
…………….o00o………….@@()@@ Buen Fin de Semana
……vVVv..00()00………_…@@@@
…..(___).`0000´…_.(_)_……L………Muy Buen Post.
…..~Y~……..|…….(_)@(_)…..|………
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No siempre lo "obvio" es una muestra clara de hacia donde dirigirnos.
ResponderEliminarMás bien nacemos para negarnos a toda lógica. Para que luego digan de los monos...
Excelente los tres, como siempre.
Abrazos!!!
¿Quien dijo que el hombre es un ser racional?
ResponderEliminarEn fin...
Jamas fumé... nada, no bebo alcohol, odio el juego... pero tengo otros vicios, que va'ser.
Besos genial colectivo!
Complicado el tema, aunque es obvio que fumar mata... Micro con mucha punta.
ResponderEliminarComo se está hablando de humo... no creo que desentone mucho metiendo mis pucheros en este blog.
ResponderEliminar¡Qué razón tienes al decir que el cigarro mata!
Lo vemos como algo minúsculo, inofensivo, pero a la larga, nos pasa una gran factura.
Las bronquitis crónicas, aún son más llevaderas, pero.. ¿y las insuficiencias respiratorias? eso es una muerte a cámara lenta que no desearía a nadie.
Saludos.
Kasioles
Estoy con Ricard, lucha contra el tabaco, a muerte. Si hay algún fumador por allí, que entienda que el pucho, pitillo!!! es muerte.
ResponderEliminarMe gusta que este post tenga ese sabor amargo a tejido infectado, ojalá se sienta así. Como la nicotina usada cuando ya es un asco.
No es de Humberto, no es su estilo (Aunque no tengo que ser tan categórica).
Beso a los tres. Y beso especial a los asmáticos y a los que sufren enfermedades, cualquier cosita de nuestro cuerpo que se desvía hacia un camino incorrecto, es un esfuerzo doble en esta vida.
Y tan sabroso que es el tabaco. Yo fumé durante 30 años... Yo decía con un cigarrillo, puedo prescindir de lo que sea y puedo afrontar cualquier cosa por difícil que sea.
ResponderEliminarUn día pensé... Si pude prescindir de todo eso ¿por qué no dejar el cigarrillo? que es tan insignificante a comparación.
Y ya tengo 3 meses sin fumar. Cuando se me ha antojado, lo que ha sido muy poco, porque fue una decisión muy determinante, respiro, respiro, respiro, de manera profunda, me relajo hasta que venzo las ganas.
Dicen que está comprobado que hace daño, entonces ¡hay que creerlo! y no morir de la creencia soberbia: "A mi no me va a tocar".
Me atenía a que he tenido una gran condición física y nunca sentí los daños.
Cuando dejé el primer mes, me sentí fatal, terrible: Sin energía, con somnolencia todo el tiempo, con pésima condición, cansada, aparte de lo malhumorada, etc. Muchísimos síntomas derivados de la abstinencia.
Al segundo mes me sentí un poquito mejor, ahora todavía no me siento tan bien como cuando fumaba, pero ya me siento mucho mejor.
Con ejercicio, agua y respiración, sé que lo voy a lograr. Y trabajando mucho mentalmente en olvidar que fumé, en no ser una ex fumadora, para partiendo de ello, descartar el cigarrillo, que al etiquetar como ex, ya se le está dando importancia.
Disculpas por extenderme, lo hago por si alguien está en la lucha de dejarlo o quisiera pero no se decide. No es nada placentero dejar de fumar, pero si es muy fácil, solo hay que apagar el último, no utilizar ningun paliativo, ni tratar de dejarlo poco a poco.
Dejar de fumar se logra de un solo golpe ¡hasta aquí! Se hace uno una limpieza dental profesional, se avisa a todos los cercanos que ya no se fuma, para verse comprometidos públicamente de verdad, se ventila casa, coche, oficina, se desaparecen ceniceros, encendedores, cigarreras, a fin de mes se "despilfarra" la suma equivalente en un capricho premio, por lo que ahorramos con lo que no fumamos y así... Fumar es el método más caro para alcanzar una muerte lenta, a través de un trance muy antiestético y doloroso.
No haré una apología del cigarrillo, sé perfectamente lo que es y produce... ¡Pero hay tantas otras cosas que matan lentamente! (sería largo y tedioso enumerar) Aunque es una decisión propia; sólo se debe respetar al no fumador. Nadie tiene porqué tragarse un humo que no le corresponde ni quiere respirar. Pero cada uno con su parecer...
ResponderEliminarLos que fumamos comprendemos claramente el error que cometemos pero desgraciadamente no lo enmendamos sabiendo las consecuencias de nuestras torpes desiciones,saludos desde Guatemala SL
ResponderEliminarHola Humberto, un escrito interesante y necesario. Un abrazo.
ResponderEliminarA este ritmo, querido público, se me van a acabar los sarcasmos.
ResponderEliminarHola.
ResponderEliminarGracias por tu visita en mi blog.
Vengo por acá a leerte, a conocerte.
Me quedo leyendo y te sigo.
Un abrazo.
Confundir este blog con mi blog personal... ¡Mata!
ResponderEliminarTres, three, três, tre, drie, trois, drei, три, tri, ثلاثة
Por favor, no nos llenen esto de comentarios genéricos omni-blog que quedan fatal.
ResponderEliminarjudas siempre igual, en cualquiera de sus formas. Excelente.
ResponderEliminarahhh!! pero la gente se sigue matando!!! Que Mal. Saludos querido Humberto. Por aqui deleitandome con tu magnifica entrada. Bendiciones!
ResponderEliminarMe gusta. Realmente supongo que para un enfermo terminal fumar o dejar de fumar ya no tiene ninguna importancia. Me pregunto qué haría yo.
ResponderEliminarMe pareció del hombre de Alabama, por cierto. Pero no podría afirmarlo.